titulo_columna

Empieza el siglo XXI

Creo que empezaremos a contar el siglo XXI a partir de la crisis del Covid-19. Ya lo sabíamos que estábamos viviendo más allá de las posibilidades del planeta, que estábamos acabando con los recursos naturales con los que contamos. ¡Vergüenza de humanidad!, hacemos investigaciones fuera del planeta mientras en la tierra hay hambre, enfermedad, racismo, descuido hacia los niños, falta de educación emocional y humanista, guerras entre países por petróleo y poder. Países que viven muy bien a costa de explotar a naciones en desarrollo. Organismos que provocan crisis económica, como el Fondo Monetario Internacional (FMI), para después proponer créditos a impagables intereses, poniendo en peligro la soberanía de los mismos.

Ya muchos científicos y ambientalistas nos lo avisaban. Los políticos utilizaban las cumbres del clima para pasear con gastos excesivos a costa del erario público y no se hacía nada al respecto. Tuvo que llegar a la humanidad un virus, que nosotros provocamos y ahora echamos culpas porque nunca nos educaron para aceptar que nos hemos equivocado. Al mundo lo desnudó el Covid.

Denuncio a esos líderes políticos que agreden a sus pueblos, a esas personas que se han quedado sin servicio médico, sin trabajo, sin un espacio de tierra donde sembrar sus alimentos… Sin esperanza alguna. Y estos líderes políticos utilizan a la policía contra sus ciudadanos, siempre para beneficiar a la plutocracia y a los asquerosamente ricos del mundo.

Observo y analizo que hay naciones que empiezan a realizar acciones propuestas por científicos, economistas, ambientalistas, etcétera. Los Países Bajos están implementando políticas en las cuales se protege la salud, la reutilización, el control de alimentos (desperdicio), transporte eficiente y verde y energías limpias.

España legisla para favorecer una economía circular, una reforma a la ley laboral para favorecer a los trabajadores, políticas para el bienestar de las personas, a pesar de líderes opositores que lo que quieren es seguir favoreciendo a los más ricos.

La Unión Europea y Canadá son otros países que muestran y nos dan ejemplo de una mayor organización para nuestras comunidades.

En México, el presidente der la Republica apuesta por las energías limpias, educación para la salud, fortalecimiento del campo, apoyo a empresas que cumplen con sus obligaciones tributarias para que se fortalezca la seguridad, la salud, a los adultos mayores, a los estudiantes. Ha propiciado un gobierno austero con la frase: “No más gobierno rico y pueblo pobre”. La movilidad en el país se hace eficiente con mejores comunicaciones y se fortalece el comercio cercano y ético.

Mucho se especula sobre el Nuevo Orden Mundial y ahora tenemos la oportunidad de apoyar a gobiernos progresistas, a regresar a la esencia de nuestro planeta, la vida misma en todas sus expresiones. Para la naturaleza no hay fronteras y así como utilizamos el turismo para obtener ganancias monetarias, igual llegará un virus y termina con todas ellas. Si cuidamos la naturaleza en los países, entre más nos coordinemos, más proporcionaremos un mundo mejor, el planeta se enfriará y podremos vivir en paz.

Dejemos que cada país regule sus políticas. No mostremos envidia para saquearlos y quedarnos con sus recursos: “de entre los individuos como entre las naciones el respeto al derecho ajeno es la paz”, dijo Don Benito Juárez García.

Acabemos con esta política mundial intervencionista y seamos honestos al desarrollarnos con nuestros productos. Y si no contamos con algunos, comprar a otros a preciso dignos y razonables lo que necesitemos. Es hora de terminar con las invasiones. La plutocracia, las guerras y el asesinato de animales por placer. Sentido y bien común.

 

YouTube: Empieza el siglo XXI en Territorio Mexica.