El gobierno federal proporcionó una actualización sobre las áreas afectadas por el huracán Otis, revelando un trágico saldo de 48 personas fallecidas, con 43 víctimas en Acapulco y cinco en Coyuca de Benítez. Además, seis personas aún están desaparecidas, mientras que 273,844 viviendas han sido impactadas por el desastre natural. El sector hotelero también ha sufrido extensos daños, con un 80% de las instalaciones reportando algún nivel de deterioro. La infraestructura eléctrica fue gravemente afectada, con la caída de 10,212 postes eléctricos durante el paso del huracán, resultando en cortes significativos en el suministro eléctrico. Hasta ahora, se ha logrado restaurar el servicio para 281,740 de los 513,524 usuarios afectados.

La devastación también se extendió a los servicios médicos, con 120 hospitales y clínicas en Acapulco reportando daños. Además, 12 carreteras fueron cerradas debido a la caída de árboles, deslizamientos de tierra y desbordamientos de cuerpos de agua, complicando los esfuerzos de rescate y ayuda.

En un esfuerzo por asistir a los afectados, se han enviado 4,000 despensas, 32,000 litros de agua y 30 toneladas de artículos de limpieza y cobertores a Acapulco. Además, 50 médicos de la Comisión Coordinadora de Institutos Nacionales de Salud y Hospitales de Alta Especialidad han llegado para brindar asistencia médica.

En términos de energía eléctrica, se logró restaurar el 60% del servicio. A pesar de los desafíos, 18 de las 38 líneas de alta tensión afectadas están completamente operativas, mientras que 20 están en proceso de reparación. En cuanto a las subestaciones, 15 de 27 han sido restauradas al 100%, y 12 están en proceso. Además, de los 155 circuitos de media tensión afectados, 48 han sido completamente restaurados, cuatro parcialmente y 103 están pendientes de reparación.