“Los estudiantes tienen que aprender a desechar viejas ideas, a reemplazarlas en la manera y tiempo debido, a aprender, desaprender y reaprender”. Alvin Toffler.

Deseamos una nueva visión de este mundo y un nuevo orden. Hacemos un llamado a los jóvenes para que tengan una lucha diferente a la de otras generaciones (anteriores) y que con sus actuaciones devuelvan a nuestro planeta a su esencia “la vida misma en todas sus expresiones”. Les hemos heredado situaciones que no son favorables para su futuro. No hemos propiciado un reparto de la riqueza de forma honesta. Hemos permitido salarios muy bajos, de miseria. Hemos permitido intervención y pérdida de soberanía en nuestros países. Hemos permitido el racismo, la plutocracia y el que ellos no respeten las leyes establecidas. Hemos permitido la manipulación emocional y que en nuestras escuelas se siga condicionando la libertad, la creatividad, que se imponga la religión y una falta y desconocimiento de sus etapas de desarrollo para favorecerles.

Hemos prometido en la educación transformación, compromiso, habilidades futuras y, sin embargo, no lo hemos conseguido. Hemos utilizado muchos recursos en guerras, armamento y control que no harían falta si en el mundo hubiera justicia. Hemos permitido la mala alimentación y como resultados, jóvenes enfermos que no se desarrollan y desenvuelven de forma activa en la vida.  Y la lista es interminable de lo que ustedes tienen que superar.

No hay duda que apoyados con sus armas y estrategias, logren cambios generacionales más favorables para su futuro. Les proponemos pugnar por instituciones educativas de puertas abiertas, en donde los chicos acudan a intercambiar experiencias y vivencias y que la meta sean los proyectos, en donde la ética, la filosofía, la literatura y la educación cívica, la música, el arte… sean más importantes que educar para presentar una evaluación.

Que en la sociedad se favorezca un orden social y económico para el bien común, donde las naciones sean las encargadas de empresas estratégicas para afianzar la soberanía de los ciudadanos y sus países. Que los ciudadanos y sociedades cumplan reglas y las leyes establecidas para una mejor convivencia. Y manejar con honestidad los recursos y no permitir saqueos por parte de otras naciones. No enriquecerse a costa de los demás y crear un sistema de inteligencia artificial donde exista justicia económica y contributiva. Crear una sociedad conectada al mundo natural, en donde se respeten los derechos de los seres vivos del planeta y vivir con lo necesario. Sin excesos. Porque todo eso nos lleva a utilizar y producir en sobreabundancia.

Propiciar que millenials y generación Z tengan un régimen alimenticio vegetariano o vegano, obteniendo con esto una mejor salud y mejor comportamiento. Favorecer un modelo distributivo, un modelo de todos para todos. Nuestras generaciones piden disculpas por no darnos cuenta y haber permitido tal degradación del planeta y sus  ocupantes y favorecer sólo a las élites, a quienes solo les han interesado sus riquezas a costa de todo.

Las constituciones garantizan que en el derecho a la existencia es fundamental poner límites a la concentración de la riqueza, sólo así las personas viviremos en libertad y podremos dejar un mundo diferente como el que a nosotros nos entregaron.

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