Claudia Sheinbaum, en un movimiento esperado, formalizó su candidatura a la Presidencia de la República ante el Instituto Nacional Electoral (INE), representando a Morena, Partido del Trabajo (PT) y Partido Verde Ecologista de México (PVEM). Este acto marca un momento crucial en el proceso electoral mexicano, alineándose con las expectativas de muchos seguidores y simpatizantes del actual movimiento político en el poder. La consejera presidenta del INE, Guadalupe Taddei, oficializó la candidatura de Sheinbaum durante un evento realizado la mañana del 18 de febrero, donde la candidata expresó su compromiso con la continuación de la llamada cuarta transformación iniciada por el actual presidente Andrés Manuel López Obrador.

Durante su discurso, Sheinbaum enfatizó la importancia de avanzar hacia un México donde prevalezca el bienestar social por encima de los intereses personales, recalcando los logros de la administración actual y su impacto en la vida de los mexicanos. Hizo hincapié en el respeto que México ha ganado a nivel internacional, la adopción de un modelo de gobierno austero y el rechazo a las políticas neoliberales que, según ella, subordinaban el estado a intereses empresariales. Además, resaltó logros económicos como la fortaleza del peso y el aumento del salario mínimo, interpretados como evidencia del éxito de la estrategia gubernamental vigente.

Finalmente, Sheinbaum anunció que el próximo 1 de marzo presentará oficialmente su programa de gobierno, el cual incluirá y ampliará las iniciativas de reforma propuestas por López Obrador. Este programa se anticipa como un compromiso para profundizar en la transformación del país, con un énfasis especial en el empoderamiento de las mujeres y la construcción de un futuro prometedor para las nuevas generaciones. Con este registro, Sheinbaum no solo busca la presidencia, sino que también se posiciona como una figura clave en la continuación de un proyecto político que ha marcado profundamente el panorama político y social de México.