Miren. He pensado mucho en la forma de escribir está entrada particular de este espacio de opinión. Al principio iba a hacerlo en un tono muy sarcástico, pero no quiero generar tampoco descontento hacia el medio que me da la oportunidad de publicar en sus páginas; pensé en hacerlo en un tono de decepción, pero parece que el hecho de hablar sobre un deporte automáticamente me exige ser imparcial pero siempre teniendo una preferencia hacia el equipo de casa (?); quería hacerlo desde la emoción, pero de alguna manera, a los ojos de otros fanáticos, me adjudica una preferencia sexual como si de algo negativo se tratara. Experimenté muchos puntos de vista gracias al internet, así que voy a intentar ser lo más neutral posible y dejaré la conclusión a su criterio.
Con la victoria de los Jefes de Kansas City este pasado domingo, se derivan una ola de comentarios por parte de los 'aficionados' de este deporte. Y es común. La realidad es que es muy obvio que tales actitudes fueran a surgir del hombre macho heterosexual, pero también es muy obvio que aparecen sin fundamento ni apertura hacia eventos que sacuden la realidad que tan celosamente protegen.
Para empezar está lo más obvio, que es la presencia de Taylor Swift en los partidos de los oriundos de Missouri, producto de su relación con el ala cerrada de los Jefes, Travis Kelce. El comentario común entre los señores que defienden el fútbol americano a capa y espada, es que Swift 'Está arruinando la NFL con su presencia'... Aunque no entiendo por qué. No es como que la intérprete de 'Cruel Summer' sea comisionada del deporte o sea influencia directa en las decisiones del vestidor ni de los Jefes ni de sus rivales. Tampoco es como que imponga de manera autoritaria una interpretación improvisada de sus temas a la mitad de los partidos. Vamos, ni siquiera es que su presencia garantice el triunfo del equipo de su pareja (los jefes ganaron 9 de 12 partidos cuando ella asistía, todos contra equipos con marca perdedora).
Se dice que 'se le pone mucha atención a ella por parte de las cámaras'. Bueno, eso no lo controla la liga tampoco. Como televisora, obviamente buscas ese extra que te dé el rating que buscas, y si en parte de tu rating se encuentra público que es fanático de ella, le das un mínimo espacio en tu transmisión. ¿Qué tan mínimo? Pues en una transmisión de 3 horas, Swift aparece menos del 1.3 % del tiempo en las repeticiones. Y aunado a eso, lo que vemos de partido realmente es un 18% de partido entre repeticiones de jugadas, tiempos muertos, tomas a los entrenadores, a los jugadores, a los comentaristas. Y en las redes sociales aparece tanto porque es por donde existe más flujo de audiencia; es más probable aumentar tus números entre otros gremios con esas plataformas que quedándote solo con tu transmisión.
También se comenta que 'La NFL está favoreciendo a los Jefes porque quieren a Taylor Swift en el Súper Bowl'. Seguramente no era el plan, pero ahora que está ahí pueden ponerle poquita información a su comentario y ver qué en esas fechas ella estará en Tokio como parte de su gira. Debería tomar un vuelo de 17 horas para llegar a Las Vegas. En su gira canta 3 horas, así que debe cuidar su voz (motivo por el cual no le permitieron conocer a Travis en primer lugar) y debe estar en Melbourne el 16 de Febrero. Bastante complicado. Ahora, la NFL tampoco se tiene por qué preocupar de que haya una luminaria en el Super Bowl… sucede que todos los años van celebridades al partido más importante del año, y les aseguro que si los Leones de Detroit hubieran jugado este 11 de febrero, le hubieran dado la misma atención a Eminem o al actor de la saga de Crepúsculo, Taylor Lauthner.
Y tal vez la última y la más ridícula es que “A la NFL le conviene tener en el Super Bowl a los Jefes porque Taylor Swift y Patrick Mahomes venden más”. Repito, no creo que al evento deportivo más sintonizado del planeta le hagan falta números. Lo que probablemente le haga falta es público nuevo y un sector de la población en el que no había pensado podía ser mercado: Las mujeres jóvenes y los grupos LGBT, quienes asisten a las carnes asadas o a los restaurantes de alitas con sus parejas, amigos o familiares únicamente por el show de medio tiempo o los comerciales. Claro que quienes son parte de este deporte por décadas intentarán proteger sus preciosos touchdowns y goles de campo, pero también es tiempo de darse cuenta que todos los deportes y todos los eventos son para todo público. Y respecto a Mahomes, es exactamente el mismo argumento que con Brady, que con Montana, que con Aikman: que a la gente le cuesta mucho admitir que una sola persona destaque tanto en un deporte de equipo y por eso hay una preferencia perpetua hacia él y su equipo.
Seguro que es más fácil crear estas teorías de conspiración que realmente culpar al desempeño de los jugadores, al plan de juego de los entrenadores, a las condiciones climáticas, a las motivaciones personales, a la exigencia del triunfo de los rivales. También debe ser difícil aperturarse a nuevas experiencias y aceptar que el emparrillado puede ser tanto un tabloide de chismes como una plataforma de denuncia social, no solo un coliseo donde se juega un deporte extremadamente complicado de menos de 30 minutos de tiempo útil ¿Tabloide de chismes? Sí se acuerdan cuando Messi llegó al Inter de Miami y la atención que se le ponía a su esposa Antonella y a las celebridades que asistían, ¿no?.
No se preocupe, hombre macho heterosexual. Su deporte está a salvo. Es válido que por alguna razón le desagrade Taylor Swift y su música. Lo que sí no es válido son esos argumentos sin fundamento que lanza sobre un tema que aparentemente le afecta más de lo que debería. Disfrute el partido y lo que pasa alrededor de él Y si no puede, pida un abrazo, nadie le va a juzgar ni le va a quitar valor a su “hombría”. Y si después de esto sigue considerando que es Swift la que está arruinando su deporte, ¿Puede explicarme en términos generales qué se considera “Interferencia de pase” o “El proceso de la recepción”?
Antes de terminar con esta columna, un comentario para quienes ven la NFL por Taylor Swift y han visto comentarios de odio hacia su ídola: Este es un ciclo que siempre se repite; tal vez no lo sepan porque son jóvenes, pero hace mucho tiempo existía una cantante llamada Jessica Simpson…