El mes de abril de 2024 no solo promete el emocionante paso del cometa diablo, sino que también está marcado por un evento astronómico adicional: un eclipse solar. Ambos fenómenos, que podrían ser visibles desde algunos puntos de México, Estados Unidos y Canadá, ofrecen una oportunidad única para los entusiastas de la astronomía.

El eclipse solar, programado para el 8 de abril, captará la atención de millones de personas en la región. Durante este fenómeno, la luna se interpondrá entre la Tierra y el Sol, proyectando una sombra sobre la superficie terrestre y oscureciendo temporalmente la luz del día. En áreas específicas, como partes de México, Estados Unidos y Canadá, este eclipse será visible en su totalidad, ofreciendo a los observadores la oportunidad única de presenciar un fenómeno astronómico impresionante.

Mientras tanto, el cometa 12P/Pons-Brooks, conocido como el cometa diablo, se acerca cada vez más a la Tierra. Aunque actualmente permanece invisible para aquellos que observan el cielo a simple vista, sin la ayuda de telescopios o binoculares, los expertos calculan que en abril alcanzará su punto más cercano al sol. Se espera que esto aumente su brillo hasta 40 veces, incrementando las posibilidades de su observación directa.

Además, desde mediados de 2023, el cometa ha entrado en una etapa altamente explosiva. Este cuerpo celeste es criovolcánico, lo que implica que ocasionalmente experimenta erupciones cuando la radiación solar alcanza su superficie helada, desencadenando la emisión de una combinación de hielo y gas, conocida como criomagma.

Estas erupciones potencian aún más el brillo del cometa, llegando incluso a aumentarlo más de 100 veces en eventos anteriores, según registros. Se prevé que a medida que se acerque al sol, estas explosiones se vuelvan más frecuentes, lo que aumentaría las posibilidades de apreciar el cometa durante el eclipse solar.