Claudia Sheinbaum, presidenta electa de México, presentó su plan de seguridad en una conferencia matutina este martes, destacando un enfoque que mezcla prevención social, fortalecimiento de la Guardia Nacional y el uso de inteligencia tecnológica para combatir la creciente violencia en el país. El anuncio llega en un momento crítico, tras el asesinato del alcalde de Chilpancingo y la muerte de seis migrantes a manos de militares en el sur del país.
Sheinbaum señaló que, a diferencia de administraciones anteriores, su gobierno no regresará a la “guerra contra el narco”, sino que buscará soluciones basadas en atender las causas que originan la violencia. La mandataria mencionó que programas como "Barrio Adentro", implementado durante su gestión en Ciudad de México, serán la base de su estrategia nacional. Este enfoque se centra en ofrecer oportunidades educativas y laborales a los jóvenes en zonas vulnerables para evitar su ingreso al crimen organizado.
Otro punto clave del plan de Sheinbaum es la consolidación de la Guardia Nacional. A pesar de la controversia por la militarización de las tareas de seguridad pública, el secretario de Seguridad Nacional, Omar García Harfuch, defendió el papel de la Guardia como un ente policial con doctrina militar, subrayando que su presencia en áreas rurales será vital para combatir el crimen en zonas sin acceso a la policía local.
El plan también incluye el fortalecimiento de la inteligencia y la coordinación entre las distintas instituciones de seguridad y justicia en el país. García Harfuch anunció la creación de una subsecretaría de inteligencia y una academia de seguridad para mejorar la capacitación de policías y fiscales. Según él, esta estrategia permitirá anticiparse a los delitos mediante el análisis de datos y una mejor cooperación entre las fuerzas de seguridad.
El reto más grande que enfrentará Sheinbaum será coordinar a las diversas instituciones a nivel nacional, en un país donde la violencia tiene raíces profundas y complejas.