Tres playas de Sídney, Australia, fueron cerradas al público tras el descubrimiento de miles de extrañas bolas negras esparcidas por la arena. Las autoridades sanitarias han indicado que estas esferas contienen componentes derivados de hidrocarburos, lo que llevó a la decisión de restringir el acceso a las playas para garantizar la seguridad de los visitantes.
El Ayuntamiento de Randwick ha emitido advertencias a la población, instando a los ciudadanos a evitar el contacto con las bolas negras, las cuales podrían ser peligrosas. A pesar de que las primeras hipótesis sugieren que las esferas podrían ser residuos de petróleo, se ha aclarado que no ha habido ningún derrame reciente en la zona, lo que genera incertidumbre sobre el origen de estos objetos.
Las autoridades han iniciado una investigación para determinar la naturaleza de estas bolas y su posible impacto ambiental. Mientras tanto, se están llevando a cabo análisis de laboratorio para identificar los componentes químicos presentes en las esferas y evaluar cualquier riesgo potencial para la salud pública y el ecosistema marino.
Este incidente ha generado preocupación entre los residentes y turistas, quienes esperaban disfrutar de las playas durante la temporada estival. Se recomienda a quienes planean visitar Sídney que estén atentos a las actualizaciones de las autoridades locales respecto a la situación y el estado de las playas afectadas.
Las playas permanecerán cerradas hasta que se complete la investigación y se asegure que no representan un peligro para la salud de los visitantes. Las autoridades locales están comprometidas a mantener la seguridad y proteger el medio ambiente.