El Sol ha llegado a una etapa de actividad intensa conocida como máximo solar, un fenómeno que ocurre cada 11 años y que puede influir en las telecomunicaciones en la Tierra. La NASA ha confirmado esta fase, caracterizada por un incremento en el número de manchas solares y erupciones, lo que ha generado inquietudes sobre el posible impacto en la conectividad a Internet y otros servicios de comunicación.
Durante el máximo solar, se producen eyecciones de masa coronal que pueden alterar el campo magnético terrestre, lo que podría resultar en daños a los satélites y en interrupciones en las redes eléctricas. Además, el aumento en la emisión de rayos X durante este periodo puede afectar las señales de GPS y otros sistemas de telecomunicaciones. A pesar de estas preocupaciones, los expertos aseguran que no hay evidencia que sugiera un evento solar de gran magnitud que cause la caída del Internet en 2024 o 2025.
Las tormentas solares del pasado han tenido efectos limitados en las telecomunicaciones. Por ejemplo, durante el “evento Carrington” de 1859, los telégrafos fallaron, pero el planeta ha superado numerosas tormentas solares desde entonces sin mayores consecuencias. Para mitigar cualquier posible interrupción en la conectividad, se están tomando medidas preventivas, como el fortalecimiento de redes en Centroamérica y Sudamérica, las cuales son cruciales para mantener la comunicación con Europa y Asia. Krista Hammond, meteoróloga de la Met Office del Reino Unido, señaló que la actividad solar se monitorea constantemente, y los gobiernos y proveedores de infraestructura crítica están alertas ante cualquier eventualidad que pueda surgir durante esta fase intensa del Sol.