Un equipo de científicos ha dado un paso significativo en la investigación oncológica al desarrollar un atlas de tumores que ofrece planos tridimensionales detallados de las biopsias de 2,000 pacientes con distintos tipos de cáncer, como el de mama, colorrectal y páncreas. Esta innovadora técnica, descrita en 12 artículos en la revista *Nature*, ha sido calificada por Fernando Peláez, director de Biotecnología del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO), como un hallazgo “comparable a cuando se descifró el genoma humano”.
El estudio del microentorno tumoral, que incluye células inmunitarias y vasos sanguíneos que nutren al tumor, ha avanzado considerablemente en la última década. La nueva metodología permite no solo visualizar la función de cada célula, sino también entender cómo interactúan entre sí y cómo evolucionan junto con el tumor. “La intuición nos decía que en el desarrollo de un tumor participan diferentes tipos de células. Ahora podemos comprobar claramente el papel de cada una”, afirma Li Ding, investigadora de Oncología de la Universidad Estatal de Washington.
La capacidad de observar el comportamiento de las células en 3D también ha revelado que un mismo tumor puede contener zonas con distintas mutaciones genéticas. Esto plantea la posibilidad de que se necesiten tratamientos específicos para abordar las variaciones en cada área del cáncer. En particular, el cáncer colorrectal ha mostrado cómo células con mutaciones diferentes pueden trabajar en conjunto, desafiando la idea de que todos los tumores provienen de un único clon.
Además, el atlas permite identificar regiones “calientes” con alta actividad inmunitaria que responden bien a las inmunoterapias, en contraste con áreas “frías” que no muestran respuesta. Esta diferenciación podría ayudar a determinar cuándo y dónde es efectivo el tratamiento inmunológico. Con este avance, los investigadores esperan que, en un futuro cercano, los médicos puedan tomar decisiones más informadas y personalizadas para combatir el cáncer, mejorando así las tasas de supervivencia y la calidad de vida de los pacientes.