Con la reciente aprobación de Estados Unidos para importar aguacate Hass desde Guatemala, el país centroamericano se ha consolidado como una nueva y fuerte competencia para Michoacán, el mayor productor de aguacate para el mercado estadounidense. Esta apertura, después de tres décadas de esfuerzos, representa un avance significativo para la agricultura guatemalteca y abre un panorama competitivo para el aguacate mexicano.

A partir de este jueves, Guatemala podrá exportar su aguacate Hass a uno de los mercados más grandes y competitivos del mundo, EE.UU., lo que coloca a los productores guatemaltecos en una posición estratégica para desafiar la supremacía de Michoacán, que históricamente ha sido el principal proveedor de aguacate en este mercado.

El Gobierno de Guatemala celebró la noticia, destacando que esta apertura permitirá nuevas oportunidades para los agricultores del país, que ahora se ven posicionados para ofrecer su producto en competencia directa con el aguacate mexicano. "Este logro abre puertas a nuevas posibilidades de exportación, no solo a EE.UU., sino también a mercados en América Latina que exigen estándares similares", comentó el Gobierno de Bernardo Arévalo en un comunicado oficial.

Se espera que en el primer año de exportaciones, Guatemala pueda generar alrededor de 14 millones de dólares con la venta de aguacate Hass, más del doble de lo que Guatemala vendió al exterior en 2022. Además, las proyecciones a largo plazo, con una estimación de 45 millones de dólares anuales para 2030, auguran un futuro prometedor para el aguacate guatemalteco.

Para Michoacán, el principal proveedor de aguacate Hass a EE.UU., esta nueva competencia es un reto significativo, ya que Guatemala cuenta con condiciones climáticas y geográficas que favorecen la producción de aguacates de alta calidad. Esto, sumado a una creciente capacidad de exportación, coloca a Guatemala como un rival directo en uno de los mercados más demandantes del mundo.

La Asociación de Exportadores de Guatemala destacó el esfuerzo constante para cumplir con los requisitos de calidad y seguridad alimentaria exigidos por Estados Unidos, un proceso que comenzó a principios de este siglo. Ahora, con la puerta abierta, los productores guatemaltecos tienen la oportunidad de fortalecer su presencia en el mercado internacional y competir con los gigantes del aguacate.

Con el aval de Estados Unidos, Guatemala se perfila como una amenaza creciente para Michoacán, y su entrada al mercado estadounidense podría transformar la dinámica de la industria del aguacate en América del Norte. Esta nueva competencia, impulsada por una base productiva sólida y una estrategia exportadora bien posicionada, podría cambiar el panorama de la fruta más demandada en Estados Unidos.