Un nuevo desarrollo ha sorprendido en la investigación sobre la trágica muerte de Liam Payne, exintegrante de One Direction, en Buenos Aires, Argentina. Las autoridades han revelado que los resultados preliminares indican que la caída de Payne no fue un suicidio, sino el resultado de una pérdida de conciencia, lo que ha cambiado el rumbo de la investigación.
Según el comunicado de la Fiscalía argentina, las pruebas y testimonios apuntan a un incidente relacionado con el consumo de sustancias, por lo que tres personas han sido imputadas en relación con su fallecimiento. Las acusaciones incluyen suministro de drogas y la posible responsabilidad en el estado de salud del cantante en el momento de su caída fatal.
La primera persona imputada ha sido Rogelio Nores, identificado como un amigo cercano de Payne. Aunque Nores declaró ser únicamente un amigo y no el representante del artista, las autoridades han señalado que su cercanía con Payne podría haber influido en la situación. En una declaración pública, Nores expresó su devastación por la tragedia: "Estoy realmente desconsolado por esta tragedia y he extrañado a mi amigo todos los días", dijo, añadiendo que no ha tenido contacto con la policía desde su declaración como testigo el 17 de octubre.
El segundo imputado es Ezequiel David Prereyra, un joven de 21 años que trabajaba en el hotel CasaSur, donde Payne se hospedaba. Según las investigaciones, Prereyra habría suministrado al cantante cocaína en dos ocasiones durante su estancia en el hotel, lo que habría contribuido a su estado de inconsciencia antes de la caída fatal.
La tercera persona implicada en el caso es Braian Nahuel Paiz, un hombre de 24 años acusado de ser proveedor de drogas para Payne. Las autoridades han afirmado que Paiz habría suministrado sustancias al ex One Direction en al menos dos ocasiones diferentes antes de su muerte.
Este caso ha generado gran conmoción entre los fanáticos de Payne, quienes siguen buscando respuestas a las circunstancias de su fallecimiento. Mientras tanto, la Fiscalía sigue recopilando pruebas y testimonios para esclarecer por completo lo ocurrido en esos últimos días de vida del músico británico.
Con la investigación en curso, las autoridades esperan que los responsables sean procesados conforme a la ley, mientras la familia y amigos de Liam Payne luchan por entender lo sucedido en una de las muertes más trágicas y misteriosas de la industria musical reciente.