La frontera entre Nuevo México y Texas se ha convertido en el cruce más mortal para los migrantes que buscan llegar a Estados Unidos. Según un reciente informe de la organización humanitaria No Más Muertes, el sector de El Paso, bajo la vigilancia de la Patrulla Fronteriza, ha registrado un alarmante incremento en los fallecimientos de personas que intentan cruzar la frontera de forma irregular.

El reporte señala que hasta la fecha, la Oficina del Médico Forense del condado de El Paso ha contabilizado 196 muertes en esta zona, lo que representa un aumento de 205% en comparación con los 148 decesos ocurridos en 2023. Estas cifras reflejan un incremento sostenido respecto a los 71 fallecimientos registrados en 2022, revelando que el 40% de todas las muertes de migrantes en la frontera estadounidense han tenido lugar en este sector en lo que va de 2024.

De acuerdo con el análisis de No Más Muertes, las cifras también revelan irregularidades en el registro oficial de las causas de muerte, particularmente en casos de caídas desde el muro fronterizo. Solo el 25% de los decesos por caídas han sido reportados como tal por la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP), lo que ha dado lugar a contradicciones entre los reportes del CBP y los resultados de las autopsias realizadas por el médico forense. En algunos casos, el informe señala que las muertes ocurridas en incidentes que involucran a la Patrulla Fronteriza no han sido debidamente documentadas por las autoridades.

Hasta hace poco, los sectores de Río Grande y Tucson eran los puntos fronterizos más peligrosos para los migrantes debido a las condiciones extremas que enfrentan al cruzar. En el sector de Río Grande, muchos migrantes pierden la vida al intentar atravesar las fuertes corrientes del río Bravo, mientras que en Tucson, las temperaturas del desierto —que pueden superar los 43°C en verano— también son fatales. Sin embargo, el sector de El Paso ha superado estas cifras en 2024, convirtiéndose en el punto más riesgoso de toda la frontera sur.

El informe también resalta el incremento en la mortalidad femenina en la frontera, un fenómeno en alza desde 2021. Este año, las mujeres representan el 25% de las muertes de migrantes, en comparación con el 10% que constituían en 2018. Estos datos sugieren que la ruta hacia Estados Unidos es cada vez más peligrosa para las mujeres, quienes enfrentan no solo las amenazas ambientales, sino también el riesgo de violencia y otros peligros en su travesía.

La organización No Más Muertes espera que este informe impulse un cambio en las políticas de seguridad fronteriza, así como una mayor transparencia en los reportes oficiales sobre los fallecimientos. Al documentar las condiciones que enfrentan quienes intentan cruzar, el grupo humanitario llama a las autoridades a replantear las estrategias de protección en la frontera y reducir los riesgos de esta travesía, con el objetivo de brindar un trato más digno a todos los migrantes y reducir el número de vidas perdidas.