La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, inauguró la primera universidad del pueblo yaqui, un proyecto educativo pionero que tiene como objetivo formar profesionistas comprometidos con el desarrollo de las comunidades indígenas. Ubicada en los alrededores de Vícam, considerada la capital de la región yaqui en el estado de Sonora, esta universidad representa un avance significativo en la inclusión y el reconocimiento de los pueblos originarios.
La oferta académica de la universidad está diseñada para responder a las necesidades sociales, económicas y culturales de los yaquis, y cuenta con cinco licenciaturas: Medicina y Salud Comunitaria, Derecho Indígena, Educación Cultural, Ingeniería en Procesos de Producción Sostenibles y Economía Social Comunitaria. Actualmente, la institución tiene una matrícula de 356 estudiantes provenientes de los ocho pueblos que conforman la nación yaqui: Loma de Guamúchil, Loma de Bácum, Tórim, Vícam, Ráhum, Huirivis y Belem.
Durante el evento inaugural, Sheinbaum destacó la importancia de garantizar el acceso a la educación superior para los pueblos originarios, señalando que esta universidad es un ejemplo del compromiso del Gobierno Federal con la justicia social y la preservación cultural. “Esta institución no solo brindará herramientas académicas, sino que también fortalecerá las raíces culturales y el sentido de identidad de los jóvenes yaquis”, afirmó la presidenta.
La universidad del pueblo yaqui es parte de un esfuerzo más amplio para saldar la deuda histórica con estas comunidades, que han enfrentado siglos de exclusión y marginación. Además de ofrecer una educación acorde con las tradiciones y necesidades locales, el proyecto busca impulsar el desarrollo sostenible en la región y fortalecer la economía comunitaria.
Con esta iniciativa, se espera que las nuevas generaciones de profesionistas yaquis contribuyan al bienestar de sus comunidades, promoviendo la salud, la justicia, la educación y la sostenibilidad en su territorio. Este paso marca un hito en la integración de los pueblos originarios al sistema educativo nacional con pleno respeto a su identidad cultural.