Israel y Hamás han logrado un acuerdo para un cese al fuego en Gaza, después de semanas de intensos enfrentamientos. El acuerdo, mediado por actores internacionales, promete una resolución parcial del conflicto y una serie de medidas clave que incluyen la liberación gradual de decenas de rehenes retenidos por Hamás y la liberación de cientos de prisioneros palestinos encarcelados en Israel debido a la guerra.

El acuerdo permitirá también la entrada de ayuda humanitaria internacional para asistir a las víctimas del conflicto, así como el regreso de los desplazados a sus hogares, a fin de que puedan recuperar sus pertenencias. Esta medida se considera un alivio para la población que ha sufrido las consecuencias de la violencia en Gaza.

Aunque aún no se ha realizado un anuncio formal, el acuerdo establece una fase inicial de alto el fuego que durará seis semanas, durante las cuales se espera la retirada gradual de las fuerzas israelíes de Gaza, un paso importante para reducir las tensiones y abrir la puerta a la reconstrucción y a los esfuerzos diplomáticos.

El acuerdo ha sido celebrado por diversas figuras internacionales, incluidos mandatarios como el expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, quienes han expresado su apoyo y esperanza de que este acuerdo logre una paz duradera en la región.