El ministro del Interior de Colombia, Juan Fernando Cristo, ha asegurado que el Gobierno nacional no permitirá que el Ejército de Liberación Nacional (ELN) ejerza control en la frontera, especialmente en la región del Catatumbo, donde la población civil enfrenta desplazamientos forzados y despojo de tierras debido a los enfrentamientos entre el grupo guerrillero y las disidencias del frente 33.

Para abordar esta situación, el Gobierno ha puesto en marcha un plan integral que incluye la sustitución de cultivos ilícitos, el registro de propiedades y acciones de seguridad para restablecer el orden en la región. "Es un paquete y la tarea a partir de ahora es gigantesca", enfatizó Cristo.

Sin embargo, en medio de esta crisis, el presidente Gustavo Petro solicitó la renuncia protocolaria de todo su gabinete, incluyendo a los directores de los departamentos administrativos, con el objetivo de realizar cambios que aseguren el cumplimiento del programa de gobierno. Esta decisión se produce en un contexto de tensiones internas y renuncias previas de otros ministros.

En respuesta a la solicitud del presidente, Juan Fernando Cristo presentó su renuncia irrevocable al cargo de ministro del Interior, sumándose a otros altos funcionarios que también han dejado sus puestos recientemente. En su carta de renuncia, Cristo defendió los logros de su gestión, incluyendo la incorporación del acuerdo de paz con las FARC y una reforma para la autonomía territorial.

La situación en el Catatumbo sigue siendo crítica, con enfrentamientos entre el ELN y las disidencias de las FARC que han provocado el desplazamiento de miles de campesinos. El Gobierno ha declarado el Estado de Conmoción Interna en la región para hacer frente a la crisis humanitaria y de seguridad.

A pesar de los desafíos, el Gobierno colombiano reafirma su compromiso de restablecer el orden y la paz en el Catatumbo, implementando medidas integrales que aborden tanto la seguridad como el desarrollo socioeconómico de la región.