Por Redacción Contra Réplica

Aumento de casos de tos ferina en México: La Secretaría de Salud emite aviso epidemiológico

La Secretaría de Salud de México ha emitido un aviso epidemiológico debido al incremento de casos de tos ferina en el país. Desde el 2020, la pandemia de COVID-19 afectó la vigilancia epidemiológica, lo que resultó en una caída en los reportes de casos. Sin embargo, en 2023 se registraron 188 casos confirmados, un aumento significativo respecto a los 463 casos confirmados en 2024. Hasta la semana siete de 2025, ya se han notificado 120 casos, distribuidos en 21 estados, destacando Nuevo León con 24 casos confirmados y la CDMX con 73 casos probables.

Causas del aumento y relación con la disminución en la vacunación
El principal factor detrás del aumento de los casos es el descenso en las coberturas de vacunación, particularmente durante la pandemia, cuando muchas actividades de inmunización fueron suspendidas. A nivel global, los contagios también han aumentado, especialmente en América, con países como Brasil, Perú, Colombia y Estados Unidos reportando un incremento de casos. La Organización Panamericana de la Salud (OPS) alertó sobre esta situación en julio de 2024.

¿Qué es la tos ferina?
La tos ferina es una infección respiratoria aguda y altamente contagiosa causada por la bacteria Bordetella pertussis. Se transmite por contacto directo con gotitas de personas infectadas al toser o estornudar. La enfermedad tiene un periodo de incubación de siete a 10 días y sus síntomas pueden durar de seis a ocho semanas.

Síntomas de la tos ferina
La tos ferina se clasifica en tres fases:

  1. Fase catarral: Duración de una a dos semanas con síntomas como secreción nasal, estornudos, lagrimeo y fiebre.
  2. Fase paroxística: Dura entre cuatro a seis semanas, con accesos de tos violenta, especialmente nocturnos, y color morado en la piel.
  3. Fase de convalecencia: Puede durar semanas o meses, con tos que va cediendo gradualmente.

Prevención de la tos ferina
La mejor forma de prevenir la tos ferina es mediante la vacunación. En México, la vacuna pentavalente acelular protege contra la tos ferina, así como contra difteria, tétanos, poliomielitis e influenza tipo B. Se administran cuatro dosis a los dos, cuatro, seis y 18 meses, con un refuerzo de la vacuna DPT a los 4 años.

Es crucial reforzar las coberturas de vacunación, especialmente entre los niños menores de 5 años, para evitar la propagación de la tos ferina y otras enfermedades prevenibles por vacunación.