Durante los días previos al equinoccio de primavera, que este año ocurrirá el jueves 20 de marzo, la pirámide de El Castillo presenta un espectáculo de luz y sombra. A partir del 15 de marzo, al atardecer, se forma una serpiente de luz que desciende por la escalinata norte-noreste del templo, fenómeno que se intensifica hasta el 20 de marzo. Este efecto es resultado de la arquitectura maya y la posición del sol durante los equinoccios.
El 'descenso de Kukulcán' es un testimonio del avanzado conocimiento astronómico y arquitectónico de la civilización maya, que diseñó sus estructuras para alinearse con eventos celestiales. Además de su valor histórico y cultural, este fenómeno atrae a turistas y locales que buscan experimentar una tradición que ha perdurado por siglos.
Se recomienda a los asistentes llegar con anticipación y seguir las indicaciones de las autoridades locales para garantizar una experiencia segura y enriquecedora.
Este evento, además de su importancia cultural, representa una gran oportunidad para promover el turismo en la región, fortaleciendo la conexión de la comunidad con su herencia ancestral y atrayendo la atención mundial hacia la riqueza de la civilización maya.