La reconocida cadena de moda rápida Forever 21 ha anunciado el cierre de todas sus tiendas en Estados Unidos tras declararse en bancarrota por segunda vez en seis años. La empresa, que en su apogeo contaba con más de 43,000 empleados y generaba ventas por 4,000 millones de dólares, no pudo hacer frente a la feroz competencia de plataformas en línea como Shein y Temu. 

La compañía presentó su solicitud de bancarrota en un tribunal de Delaware, citando la intensa competencia y el aumento de los costos operativos como factores clave en su declive financiero. A pesar de haber contactado a más de 200 posibles inversores, no logró encontrar un comprador viable, lo que la llevó a iniciar ventas de liquidación en más de 350 tiendas en todo el país. 

Además de la competencia, factores como la pandemia de COVID-19, la inflación y las interrupciones en la cadena de suministro agravaron la situación económica de Forever 21. Mientras cesa sus operaciones en Estados Unidos, la empresa continuará su presencia internacional y en línea bajo la dirección de Authentic Brands Group, que mantiene el interés de posibles socios para revitalizar la marca en el futuro.

Este cierre marca el fin de una era para una marca que, durante las décadas de 1990 y 2000, fue sinónimo de moda asequible y tendencias juveniles. La desaparición de Forever 21 del mercado estadounidense refleja los desafíos que enfrentan las tiendas físicas tradicionales ante el auge imparable del comercio electrónico y las nuevas dinámicas de consumo en la industria de la moda.