Claudia Sheinbaum afirmó que la crisis de desapariciones en México no debe politizarse, a pesar de los intentos de sus adversarios por utilizar el tema en su contra. En referencia al rancho Izaguirre, en Jalisco, señalado como un posible centro de exterminio del crimen organizado, aseguró que su administración no ocultará información y permitirá que las investigaciones avancen sin interferencias.
La mandataria enfatizó que el caso está en manos de la Fiscalía General de la República (FGR), que será la encargada de esclarecer si hubo omisiones o irregularidades en la indagatoria estatal, así como posibles responsabilidades del exgobernador Enrique Alfaro. Señaló que su gobierno no dará órdenes a la fiscalía, ya que cualquier acción debe derivarse de los hallazgos de la investigación.
Sheinbaum destacó la importancia de informar con transparencia y respaldó la forma en que se ha manejado el caso hasta ahora. Subrayó que la presentación de datos técnicos y responsables por parte del fiscal es una señal de que el proceso se realiza con seriedad y sin sesgos políticos. Además, reiteró que su administración se mantendrá firme en el compromiso de esclarecer los hechos.
Por otro lado, la presidenta denunció la existencia de campañas de desinformación en redes sociales que buscan debilitar a su gobierno. Aseguró que muchas de estas estrategias no provienen de México y que su equipo seguirá revelando el origen de los ataques digitales. Finalmente, insistió en que la crisis de desaparecidos será tratada con transparencia y sin manipulaciones políticas.