Ante el cercano y creciente período de estrés hídrico en San Luis Potosí, el gobernador, Ricardo Gallardo Cardona lamentó nuevamente, la pobre gestión del Interapas para abastecer a cuatro de los municipios en la zona metropolitana. A partir de nuevas infraestructuras para la captación de aguas superficiales; reiteró que hasta que haya un avance en su disolución, el gobierno del Estado procurará que San Luis Potosí no se quede sin agua.

La construcción de la presa Las Escobas "es un proyecto de agua, cien por ciento para la capital", según apuntó el jefe del ejecutivo estatal. Con una inversión bipartita de 600 millones de pesos, entre el ejecutivo federal y estatal; el proyecto, consiste en la habilitación de un ducto de un kilómetro que resolverá la problemática de estiaje en el municipio de San Luis.

A comparación del embalse El Realito en Guanajuato, que señaló, abarca más de 100  kilómetro. Las Escobas, busca contrarrestar las constantes fallas en la conducción del suministro. En ese sentido, el gobernador defendió el proyecto argumentando que "son dos cosas totalmente distintas" señaló.

"Nos estamos preparando para ponerle un remedio definitivo al tema del agua... Estamos haciendo el trabajo que a los organismos les toca, que es el Interapas y que no sigue dando pie con bola", señaló.

Finalmente, en el orden de los presupuestos para este y otros proyectos, como la reconstrucción de ductos en la presa El Peaje y la instalación de una planta tratadora de agua para la capital. Aseguró que la capital potosina, tendrá agua suficiente para este 2025.