Por Redacción Contra Réplica

Despiden con música y gratitud al maestro José Miramontes Zapata en el Teatro de la Paz

El legado del director y fundador de la Orquesta Sinfónica de San Luis Potosí vivirá en cada nota que se escuche en el recinto que fue su casa.

El corazón cultural de San Luis Potosí latió con fuerza este lunes en el Teatro de la Paz, donde cientos de personas se reunieron para rendir homenaje póstumo al maestro José Miramontes Zapata, fundador y director de la Orquesta Sinfónica de San Luis Potosí, quien falleció el pasado sábado.

El escenario que tantas veces lo vio dirigir fue, esta vez, el espacio que acogió el último adiós de colegas, alumnos, autoridades y amantes de la música que, con profunda gratitud, reconocieron su legado artístico y humano. Su féretro, rodeado por guardias de honor, fue acompañado por los acordes de la Orquesta Sinfónica y el Coro “Oralia Domínguez”, en un homenaje lleno de solemnidad, emoción y respeto.

Durante la ceremonia, el titular de la Secretaría de Cultura, Mario García Valdéz, recordó al maestro como un referente que entregó su vida al arte y a la formación de nuevas generaciones. “Fue más que un director. Fue un formador de almas sensibles, de músicos con propósito”, expresó.

Por su parte, el secretario general de Gobierno, Guadalupe Torres Sánchez, en representación del gobernador Ricardo Gallardo, destacó la visión del maestro Miramontes, quien entendía la música como una herramienta de transformación social. “Nos deja una herencia de armonía, disciplina y esperanza”, dijo.

El homenaje incluyó emotivos mensajes de familiares, amigos y discípulos, quienes compartieron anécdotas que pintaron el perfil de un hombre apasionado, generoso y profundamente comprometido con su comunidad.

José Miramontes Zapata dirigió más de mil 500 conciertos en el Teatro de la Paz, y fue en ese mismo lugar donde, el pasado Miércoles Santo, levantó la batuta por última vez con el “Réquiem” de Gabriel Fauré. Sin saberlo, se despidió con música… la misma que hoy lo acompaña hacia la eternidad.