La cadena de comida rápida El Pollo Feliz atraviesa una de sus mayores crisis de imagen en Tlaxcala, luego de que ocho de sus sucursales en los municipios de Tlaxcala, Chiautempan y Huamantla fueran suspendidas por autoridades estatales tras operativos sanitarios realizados del 5 al 9 de mayo por la Comisión Estatal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Coeprist). Aunque el gobierno afirma que la clausura responde a violaciones a normativas sanitarias, la medida ha sido percibida por amplios sectores como una respuesta política a los recientes comentarios ofensivos del dueño de la marca, José Luis Salinas.
Durante una reunión privada, Salinas afirmó: “Ser director del Metro, digo para los de Tlaxcala que no están aquí, es mejor que ser gobernador de Tlaxcala”. La grabación del comentario se viralizó en redes sociales, generando una ola de indignación entre la ciudadanía y autoridades del estado. La gobernadora Lorena Cuéllar calificó las declaraciones como “profundamente ofensivas y clasistas”, y exigió una disculpa pública al empresario y a quienes lo acompañaban.
El propietario publicó una disculpa en sus redes sociales, pero muchos la consideraron insuficiente. Casi al mismo tiempo, comenzaron a circular imágenes de las sucursales clausuradas, lo que alimentó la versión de que se trataba de una represalia encubierta. Si bien el gobierno estatal aclaró que las inspecciones incluyeron diversos giros comerciales —consultorios, carnicerías y purificadoras— y que 18 establecimientos fueron suspendidos en total, el daño a la imagen de El Pollo Feliz ya estaba hecho.
La Coeprist justificó la clausura por la presunta violación de ocho artículos de la Ley General de Salud y la Ley de Salud del Estado, sin detallar las faltas. Mientras tanto, decenas de empleados han quedado temporalmente sin trabajo, y la marca enfrenta una intensa polémica pública. Para algunos, se trata de un castigo justificado por el desprecio mostrado hacia la población tlaxcalteca; para otros, es un preocupante uso del poder público contra la libertad de expresión.