Por Redacción Contra Réplica

Tensión en Jerusalén: Marcha del Día de Jerusalén desata actos ultranacionalistas y provoca irrupción en complejo de la ONU

Grupos de jóvenes judíos israelíes recorrieron barrios musulmanes con cánticos provocadores antes de la marcha nacionalista, mientras manifestantes irrumpieron en instalaciones de la ONU; crece la preocupación por la violencia en medio del conflicto en Gaza.

La tradicional Marcha del Día de Jerusalén, que conmemora la captura israelí de Jerusalén Este en 1967, estuvo marcada este lunes por actos de provocación, cánticos racistas y un aumento de las tensiones en la Ciudad Vieja.

Previo a la marcha, grupos de jóvenes judíos ultranacionalistas desfilaron por los barrios musulmanes coreando consignas como “muerte a los árabes” y “que tu aldea arda”. Comerciantes palestinos cerraron temprano sus locales, mientras fuerzas policiales israelíes se desplegaron por los estrechos callejones de la Ciudad Vieja.

En un episodio particularmente tenso, una docena de manifestantes, incluida la legisladora israelí Yulia Malinovsky, forzaron la entrada al complejo de la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos (UNRWA) en Jerusalén Este, a la vista de la policía. El recinto permanece vacío desde enero por motivos de seguridad, pero sigue protegido bajo el derecho internacional.

La marcha se da en un contexto de elevada tensión tras casi 600 días de guerra en Gaza. En años anteriores, la manifestación ha derivado en episodios de violencia, e incluso fue uno de los detonantes del conflicto de 11 días en 2021.

El ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben-Gvir, visitó el sitio sagrado de la Explanada de las Mezquitas (conocido como el Monte del Templo para los judíos), acompañado de otros legisladores. “Qué bonito es ver a tantos judíos inundando el Monte del Templo”, declaró, pese a que las visitas religiosas judías en el lugar históricamente han estado limitadas a actos no religiosos para mantener el frágil statu quo.

El aumento de visitas y oraciones judías en el sitio ha sido denunciado por los palestinos como una violación de acuerdos establecidos y una provocación que pone en riesgo la estabilidad de la región.

Mientras tanto, activistas propaz intentaron intervenir pacíficamente para evitar enfrentamientos entre manifestantes y residentes.

Israel considera a Jerusalén como su capital indivisible, mientras que los palestinos reclaman Jerusalén Este como la capital de su futuro Estado. El estatus de la ciudad sigue siendo uno de los temas más sensibles del prolongado conflicto.

La ONU no se ha pronunciado aún sobre la irrupción en el complejo de UNRWA. La policía israelí, por su parte, informó de varias detenciones durante el día, sin dar más detalles.