Ante la prolongación del paro magisterial y el plantón en el Zócalo capitalino, el gobierno federal ha dejado claro que el diálogo con la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación continuará a través de los titulares de las secretarías correspondientes, descartando la intervención directa de la Presidencia. La postura fue confirmada durante la conferencia matutina, donde se subrayó que los encargados del proceso cuentan con toda la autoridad necesaria.
La mandataria explicó que los representantes de Gobernación y Educación Pública son los responsables designados para encabezar las mesas de negociación con el magisterio disidente. Destacó que estas dependencias tienen plena atribución para buscar acuerdos y atender las demandas, por lo que no es indispensable su participación en las conversaciones.
Respecto a la petición principal de derogar la reforma al sistema de pensiones, el Ejecutivo sostuvo que ya se han adoptado medidas compensatorias, como la creación del Fondo de Pensiones para el Bienestar. Aseguró que este instrumento busca atender las preocupaciones de los trabajadores sin necesidad de eliminar por completo la legislación vigente.
Mientras tanto, la Coordinadora continúa con su movilización y exige una reforma profunda al sistema de pensiones. Las negociaciones avanzan con cautela en un contexto de tensión social, donde el gobierno federal apuesta por soluciones institucionales, manteniendo la puerta abierta al diálogo a través de los canales establecidos.