La Unión Nacional de Trabajadores Agrícolas (UNTA), encabezada por Álvaro López Ríos, manifestó su repudio al despliegue de marines en Los Ángeles como parte de las medidas antimigrantes implementadas por el gobierno estadounidense. La organización calificó como desproporcionada y peligrosa la presencia de fuerzas armadas en un contexto de protesta social, y convocó a la movilización en México para exigir un alto a las agresiones.
De acuerdo con López Ríos, el uso de personal militar entrenado en control de multitudes representa una amenaza directa contra la comunidad migrante, especialmente la de origen mexicano. Consideró que estas decisiones escalan el conflicto en lugar de atender las causas de la migración y vulneran de forma sistemática los derechos humanos.
En respuesta, la UNTA hizo un llamado a las organizaciones sociales, sindicales y campesinas del país a sumarse a manifestaciones pacíficas frente a la embajada y los consulados de Estados Unidos. Señalaron que la protesta es una vía legítima para expresar el rechazo a políticas que criminalizan a quienes buscan mejores condiciones de vida.
El dirigente también pidió a la presidenta Claudia Sheinbaum adoptar una postura firme ante esta situación. Propuso que el gobierno mexicano impulse acciones diplomáticas ante instancias internacionales y establezca mecanismos de defensa para los connacionales afectados, recordando que la migración laboral hacia Estados Unidos es un fenómeno histórico que no debe ser tratado con represión.