Por Redacción Contra Réplica

Exige diputado protección real para paisanos ante redadas en EE.UU.

Marcelino Rivera llama a la SRE a actuar ante violaciones a los derechos humanos de migrantes mexicanos.

El diputado Marcelino Rivera Hernández, presidente de la Comisión de Asuntos Migratorios del Congreso del Estado, instó a la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) a reforzar sus estrategias de protección y defensa de los derechos humanos de los mexicanos que radican en Estados Unidos, quienes enfrentan un ambiente hostil debido a las redadas migratorias ordenadas por el expresidente estadounidense Donald Trump.

El legislador señaló que estas redadas, muchas veces ejecutadas con uso excesivo de la fuerza, atentan directamente contra la dignidad de los connacionales. “No podemos permitir que se criminalice a nuestros paisanos, mucho menos que se violenten sus derechos sin que exista una reacción contundente del gobierno mexicano”, expresó.

Rivera Hernández subrayó la necesidad de que la política exterior de México se base en un enfoque humanitario y estructural, dejando claro que las soluciones no deben recaer en la violencia o la represión. “El Gobierno Federal debe emitir una postura diplomática firme, que exija apego a los derechos civiles y al debido proceso en cada intervención migratoria”, dijo.

El legislador potosino también pidió que los consulados mexicanos, particularmente en estados como California, activen todos los mecanismos de protección consular, ofreciendo asistencia legal inmediata a quienes han sido detenidos. “Debemos garantizar que nuestros paisanos reciban apoyo, orientación y acompañamiento, tanto ellos como sus familias”, agregó.

Actualmente se tiene conocimiento de al menos 42 mexicanos detenidos en Los Ángeles, la mayoría empleados en una fábrica textil, lo que, según Rivera Hernández, obliga a redoblar esfuerzos para darles seguimiento legal y evitar su deportación sin defensa adecuada.

Finalmente, llamó al Instituto Estatal de Migración a coordinarse con la SRE y organizaciones civiles para establecer redes de apoyo que permitan informar, acompañar y proteger a los migrantes, tanto en territorio estadounidense como a su regreso al país.