Desde Palacio Nacional, la presidenta Claudia Sheinbaum presentó una visión ambiciosa para el futuro del turismo en México: convertir al país en el quinto destino más visitado del mundo para el año 2030. La meta contempla un aumento del 40% en la llegada de turistas internacionales, sustentado en una estrategia que combina inversión, promoción y conectividad.
Acompañada por la secretaria de Turismo, Josefina Rodríguez Zamora, la mandataria subrayó que el turismo es ya el tercer generador de divisas para el país. Solo en los primeros cuatro meses de 2025, México recibió más de 31 millones de visitantes internacionales y una derrama económica superior a los 13 mil millones de dólares. A esto se suma un notable flujo de visitantes a museos, zonas arqueológicas y cruceros.
El plan contempla un portafolio de inversión turística superior a los 20 mil millones de dólares con proyectos en 22 estados, al que se espera agregar otros 30 mil millones mediante alianzas nacionales y extranjeras. También se impulsará la diversificación de mercados, el fortalecimiento del Tren Maya como eje turístico del sureste y una mayor presencia de la marca México en el escenario global.
Además, se plantean metas específicas: aumentar el número de vuelos, pasajeros y viajes ferroviarios, así como elevar la calidad del servicio con más certificaciones turísticas. Para Sheinbaum, esta ruta no solo busca atraer más visitantes, sino proyectar el valor cultural, histórico y natural de México como un destino global de primer nivel.