Cuauhtli Fernando Badillo Moreno puede ser un nombre que no le diga mucho a los potosinos, y con justa razón, pues apenas termina su encargo como diputado federal y en tres años en la Cámara de Diputados su paso solamente fue anecdótico. El tema es que ahora se quiere aferrar al presupuesto público en el Congreso del Estado.

El fracaso legislativo que representaron algunos personajes de la cuatroté, está perfectamente representado en el joven Badillo Moreno, quien a pesar de sus 31 años de edad pasó por la curul como un viejo político priista que no aportó gran cosa al andamiaje legislativo del país.

Esta conversión, de un joven con futuro político a un diputado más parecido al viejo PRI, no es extraña cuando se observan los “liderazgos” de Morena en la entidad que lo promovieron hacia donde llegó, por ejemplo, Sergio Serrano Soriano, uno de los artífices de la tragedia potosina de Morena.

Los potosinos incluso ni siquiera lo recuerdan como diputado federal pese a que en sus redes sociales presumió fotografías con liderazgos nacionales de Morena como Mario Delgado Carrillo, dirigente nacional del partido y con quien compartió Grupo Parlamentario en la Cámara.

“Lo mejor que puede hacer un tipo tan nefasto, flojo, nocivo y vividor es retirarse inmediatamente de la política… ¡Pero no! No se quiere ir, de manera desvergonzada se aferra a la posibilidad de convertirse en diputado local plurinominal para continuar viviendo como parásito sin dejar ningún beneficio al estado”, dice un mensaje que circula por grupos de WhatsApp de personas afines a la cuatroté.

“Este sujeto, aunque sabe que los estatutos de MORENA no le favorecen se ha dedicado a fabricar falsos pretextos, e incluso se ha ido a arrastrar frente a las autoridades electas ofreciéndose como un aliado, ¡por favor! Ni que no lo conocieran”, agrega otro comentario de alguien que refiere la impugnación promovida por Badillo Moreno para intentar ingresar al Congreso del Estado.

El otro fracaso de Morena en San Luis Potosí, el electoral, se debe en gran medida a este tipo de personajes que llegaron a ejercer un cargo de elección popular arrastrados por la popularidad del presidente Andrés Manuel López Obrador, pero sin mérito alguno ni experiencia, lo que llevó al partido guinda a perder en los 15 distritos locales y tener que agarrarse del Partido Verde para tener cierta representación en la Cámara de Diputados.