En esta temporada invernal, donde existen repuntes de enfermedades respiratorias, dadas las bajas temperaturas, la alimentación sana y balanceada es fundamental para ayudar al organismo a fortalecer el sistema inmunológico, pues un estado nutricional deficiente provocaría mayor riesgo de contraer infecciones por virus, bacterias, hongos u otros organismos unicelulares.
El coordinador de Nutrición y Dietética de la Jefatura de Prestaciones Médicas del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en San Luis Potosí, nutriólogo Alejandro Jiménez Ortiz, recomendó a la población seguir una correcta alimentación durante la temporada invernal para ayudar al organismo.
Mantenerse hidratado
Subrayó que frente a agentes extraños una primera protección lo constituyen las barreras físicas y químicas, como son la piel y la mucosa, pero es indispensable tener un buen estado nutrimental y de hidratación, para que estas barreras funcionen de manera correcta.
“Es recomendable tomar de dos a tres litros diarios de agua, o siendo más estrictos de 30 a 35 mililitros por kilogramo de peso”, puntualizó Alejandro Jiménez Ortiz.
Las proteínas y aminoácidos son importantes
El coordinador de nutrición manifestó que cuando los patógenos logran ingresar al cuerpo, el sistema inmune pone en marcha sistemas de defensa donde actúan leucocitos, anticuerpos, citoquinas y sistemas de complemento.
En consecuencia, un buen estado de nutrición garantiza la correcta división de estas células y la formación de sustancias inmunológicas.
Para la población mexicana se recomienda un consumo diario de 1.0 a 1.2 gramos de proteína por kilogramo de peso; los cuales se adquieren en una dieta sana, variada y suficiente, preferentemente avalada por un nutriólogo.
La vitamina C
El especialista indicó que además de las proteínas y el agua, también se requiere de vitaminas y minerales, los cuales ejercen un papel importante como factores de muchas vías metabólicas y se consideran esenciales para la integridad y el perfecto funcionamiento del sistema inmune.
Comentó que la vitamina C afecta algunos parámetros del sistema inmunitario, pudiendo producir su deficiencia un aumento en la susceptibilidad a sufrir infecciones, sobre todo a nivel del tracto respiratorio superior.
En ese sentido, subrayó que se debe garantizar en la dieta diaria el consumo de cítricos ya que son una excelente fuente de vitamina C, incluir alimentos de colores naranjas, rojos y amarillos ya que estos alimentos tienen altos contenidos de beta-carotenos.