Gracias a la prohibición que existe en todo el mundo para el uso de productos químicos que causaron la aparición de un agujero en la ozonosfera sobre el Antártico, podría haber una recuperación para 2066.

Así lo informó un grupo de asesores científicos del Protocolo de Montreal, quienes señalaron que el 99 % de las sustancias prohibidas han dejado de ser utilizadas, lo que está permitiendo la recuperación de la ozonosfera.

Las Naciones Unidas señaló, que una enmienda aprobada en 2016 exige la eliminación paulatina del uso de hidrofluorocarburos (HFC), que aunque no dañan el ozono de forma directa sí contribuyen al cambio climático.

Indicaron que si se mantienen las políticas actualmente en vigor, en el Ártico, la recuperación se producirá más rápidamente, en 2045, mientras que en el resto del mundo será en 2040. 

La ONU, calificó las conclusiones de los científicos como "una noticia fantástica". Sin la protección del ozono, un gas compuesto por tres átomos de oxígeno, la radiación ultravioleta del Sol dañaría de forma irreversible la vida sobre el planeta

Existe una Inyección, llamada Estratosférica de Aerosoles (IEA) la cual ha sido propuesta como un posible método para limitar la cantidad de luz solar que llega a la superficie de la Tierra y así reducir el cambio climático.

Aunque también se ha alertado ya sobre los posibles efectos negativos de la inyección en la estratosfera de productos para reducir el cambio climático, como la circulación y producción de ozono así como las tasas de destrucción y transporte del gas, por ello se continuarán realizando estudios.