Por Berenice Gutiérrez

Antonio Pedroche, las otras manos mexicanas que tallaron a “Pinocho”

Originario del municipio de Atlixco, ubicado en Puebla, Antonio Pedroche, creó escenarios para la ya multipremiada película de animación de Guillermo del Toro.

La película Pinocho, del mexicano Guillermo del Toro, ha recibido la ovación de la crítica, y el trabajo se ha visto reflejado en la temporada de premios del cine, incluida la nominación a los premios Oscar 2023, trabajo que involucró a varias manos mexicanas, además de las del famoso cineasta, y una de ellas es Antonio Pedroche Aguirre uno de los tres poblanos que participaron en la producción, aquí su historia.

Originario del municipio de Atlixco, ubicado en Puebla, Antonio Pedroche, creó escenarios para la ya multipremiada película de animación. El joven poblano diseñó y creó las maquetas en las que se desarrolló una parte de la historia del niño de madera que desea ser un niño de verdad.

Antonio Pedroche es un diseñador gráfico que adquirió los conocimientos en stop motion, técnica en que se realizó Pinocho, su habilidad ha quedado inmortalizada en otros trabajos, entre ellos, 'Inzomnia', una cinta de animación del director Luis Téllez en el año 2017, que aún no ha sido estrenada, sin embargo, ello lo catapultó a la producción del cineasta Guillermo del Toro.
"Mi participación dentro de la industria de la animación ya tiene un rato, llevo alrededor de 12 años, dentro de la industria. Realmente ha sido un camino de mucho trabajo, de mucho esfuerzo. Específicamente mi labor dentro de los proyectos animados tiene que ver con la creación de los escenarios, el diseño, la logística y la elaboración de las maquetas para stop motion".

En 2020 se unió al ejército que hizo magia en el Taller de Chucho en Guadalajara, lugar en que concentró su ingenio para aportar el escenario cuando Pinocho es recibido por un grupo de conejos en una especie de limbo después de la muerte, labor que fue desarrollada durante tres meses, y que es, quizá, uno de los momentos cruciales de la cinta.
"Guillermo decidió mandar una parte de su película y fue muy importante, muy interesante lo que se mandó a México, lo que se mandó a Guadalajara a trabajar. Digamos que no seguía la misma línea que se estaba realizando en Portland en Estados Unidos. Realmente fue algo increíble porque nos dio la oportunidad, no sólo a mí, sino a toda la industria de la animación en México, gracias a esto podemos levantar la voz y mencionarle al mundo que se pueden realizar películas interesantes en México".

Aunque el trabajo empleado en Pinocho fue complicado, fotograma por fotograma, Antonio asegura que la perseverancia es indispensable para construir una realidad a partir de los sueños y reconoció que México puede ser cuna importante de la animación.
"Yo cuando me iba a imaginar que iba a poder participar en una película de esta magnitud. Hay que pensar que los sueños realmente se pueden cumplir, pero todo es a base de mucho, mucho esfuerzo"

Es así como un pedacito de Puebla aparece en los créditos del largometraje que ya es reconocido en los Premios Oscar con una nominación importante.