En un esfuerzo por potenciar la sostenibilidad y el bienestar ambiental en las zonas urbanas, las comisiones de Ecología y Medio Ambiente, junto con la de Desarrollo Territorial Sustentable, están revisando una reforma a la Ley de Protección y Conservación de Árboles Urbanos en el Estado de San Luis Potosí. Esta propuesta legislativa sugiere que los ayuntamientos desarrollen un programa continuo y progresivo de forestación urbana, el cual no solo estaría sujeto a la disponibilidad presupuestaria, sino que también buscaría la cooperación de los niveles estatal y federal, así como de la iniciativa privada y el sector social.

El objetivo principal de la reforma es crear espacios verdes urbanos que contribuyan a combatir problemas ambientales como las altas temperaturas y la escasez de agua. Los árboles urbanos, además de mejorar la calidad del aire y reducir la contaminación, son vitales para la salud pública y el bienestar de las comunidades. Según datos de la ONU, los árboles en las ciudades pueden absorber hasta 150 kg de gases contaminantes cada año, jugando así un papel crucial en la mitigación del cambio climático y en la mejora de la calidad de vida urbana.

Además de sus beneficios ambientales, los árboles urbanos ofrecen ventajas significativas en la regulación del clima local, pudiendo reducir las temperaturas del aire entre 2 y 8 grados centígrados. También desempeñan un rol importante en la gestión del agua, ayudando a prevenir inundaciones y reduciendo el riesgo de desastres naturales mediante la regulación del flujo de agua. La iniciativa propuesta busca no solo plantar más árboles, sino también garantizar su cuidado y mantenimiento continuo, promoviendo así una mayor conciencia y participación comunitaria en la conservación de estos valiosos recursos naturales.