El primer ministro de San Vicente y Granadinas, Ralph Gonsalves, reportó al menos una víctima mortal y una devastación masiva tras el paso del huracán Beryl por las islas Union, Mayreau y Canouan. Gonsalves describió al huracán como “muy peligroso y destructivo”, causando daños significativos en el 90% de las viviendas en Union Island y afectando a cientos de familias que ahora buscan reconstruir sus vidas.
Beryl, que se formó de manera inusualmente rápida en el Atlántico, ha continuado su trayecto a través del sur del Caribe, dejando un rastro de destrucción en Granada, Barbados y Trinidad y Tobago, y amenaza con impactar el sur de República Dominicana y Haití, según el Centro Nacional de Huracanes (NHC) de Estados Unidos. La tormenta ha generado una profunda preocupación en la región, con el presidente de Caricom, Irfaan Ali, expresando su inquietud por los daños sustanciales a infraestructuras y propiedades privadas.
A pesar de la devastación, se espera que Beryl pierda fuerza a mitad de la semana, aunque seguirá siendo un huracán. Esta temporada de huracanes en la cuenca atlántica, que comenzó el 1 de junio, ya ha visto la formación de tres tormentas tropicales: Alberto, Beryl y Chris.