El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha dado positivo a COVID-19, según informó la Casa Blanca. El mandatario, quien se encuentra vacunado y ha recibido dosis de refuerzo, está experimentando síntomas leves de la enfermedad.
La prueba positiva se detectó este miércoles por la mañana, tras su primer evento en Las Vegas. Biden se trasladará a Delaware para autoaislarse en su residencia de Rehoboth, siguiendo las pautas de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) para personas sintomáticas. La Casa Blanca ha asegurado que se proporcionarán actualizaciones regulares sobre su estado de salud, mientras el presidente continúa desempeñando sus funciones desde el aislamiento.
Este diagnóstico llega en un momento crítico para Biden, quien enfrenta crecientes demandas dentro del Partido Demócrata para que reconsidere su candidatura presidencial en favor de otro candidato que pueda enfrentarse eficazmente al republicano Donald Trump. La reciente recuperación de Trump tras un atentado ha aumentado su popularidad en las encuestas, intensificando la presión sobre Biden y su equipo.
La Casa Blanca enfatizó que el presidente seguirá las recomendaciones médicas y que, a pesar de la enfermedad, se mantendrá activo en sus responsabilidades ejecutivas. Esta situación no solo pone a prueba la resistencia física de Biden, sino también su capacidad para liderar en tiempos de crisis sanitaria y política.
En conclusión, mientras Biden enfrenta esta enfermedad, su administración se encuentra bajo el escrutinio del público y de su partido, en medio de un panorama político altamente competitivo y desafiante.