La tormenta, que amenaza con vientos poderosos e inundaciones, ha llevado a las autoridades a ordenar evacuaciones en al menos nueve condados, incluidos Citrus, Hillsborough, Charlotte, Golfo, Manatee y Pinellas.

El Centro Nacional de Huracanes (NHC) pronostica que Helene tocará tierra en el área de Big Bend a última hora del jueves, con vientos máximos sostenidos de 96 km/h. Las autoridades advierten que el área podría enfrentar una marejada ciclónica de hasta 4.5 metros (14.8 pies). Ante la emergencia, el gobernador Ron DeSantis amplió la declaración de emergencia de 41 a 61 condados, y activó a 3,000 miembros de la Guardia Nacional de Florida.

El gobernador de Georgia, Brian Kemp, también declaró el estado de emergencia en su estado anticipándose a los efectos de la tormenta. Además, varios distritos escolares y universidades de Florida han anunciado cierres preventivos, mientras que el sector asegurador del estado enfrenta dificultades debido a la frecuencia de huracanes en la región. El NHC advierte que la trayectoria de Helene podría cambiar, lo que alteraría las áreas de mayor impacto.

Con información de Infobae.