Las recientes inundaciones en España han dejado al menos 155 personas fallecidas, según informaron fuentes gubernamentales. La tragedia ha golpeado especialmente a la Comunidad Valenciana, donde se reporta el mayor número de víctimas, así como a Castilla-La Mancha y Andalucía, regiones que también enfrentan serios daños y pérdidas.

Las intensas lluvias y el desbordamiento de ríos y cauces provocaron graves inundaciones, afectando tanto zonas residenciales como áreas agrícolas. Las autoridades locales y nacionales han movilizado equipos de rescate y ayuda para apoyar a los afectados y minimizar los daños. Sin embargo, la magnitud del desastre ha dejado comunidades enteras devastadas y enfrentando importantes retos de reconstrucción y recuperación.

Por su parte, el gobierno español ha activado mecanismos de emergencia para brindar apoyo a las regiones más afectadas y ha declarado que se llevarán a cabo evaluaciones exhaustivas de daños para establecer el apoyo necesario en la recuperación de infraestructuras y el restablecimiento de servicios básicos.