Los incendios forestales en California han cobrado la vida de al menos cinco personas, informaron los cuerpos de bomberos que enfrentan una crisis marcada por múltiples siniestros fuera de control. Hasta ahora, tres grandes incendios han arrasado el área, dejando un rastro de devastación.

A pesar de que los vientos han comenzado a amainar y refuerzos de bomberos de todo el estado han llegado para relevar a las agotadas cuadrillas, la amenaza persiste. Un sexto incendio se desató en Hollywood Hills, obligando a evacuar a miles de residentes, con órdenes que se extendieron hasta zonas de Santa Mónica.

Las autoridades reportaron que más de 1,000 estructuras, en su mayoría viviendas, han sido destruidas. Además, aproximadamente 130,000 personas permanecen bajo órdenes de evacuación en el área metropolitana, mientras las cuadrillas luchan por contener las llamas y proteger a la población.

Los incendios, alimentados por condiciones secas y fuertes vientos, han complicado los esfuerzos de contención. Equipos de emergencia continúan trabajando a contrarreloj para limitar los daños y garantizar la seguridad de las comunidades afectadas.

Esta serie de incendios subraya la creciente vulnerabilidad de California a desastres naturales agravados por el cambio climático, destacando la urgencia de medidas preventivas y de apoyo a las víctimas.