El Papa Francisco ha mostrado avances en su estado de salud luego de 29 días de hospitalización en el hospital Gemelli de Roma. Según fuentes vaticanas, el pontífice ya puede moverse con más facilidad, caminando con ayuda entre su cama y el sillón donde pasa gran parte del día. Aunque su estado sigue siendo delicado, su evolución es positiva y responde bien a los tratamientos médicos.
Desde su ingreso, el Papa ha recibido terapia de oxígeno y cuidados especializados para combatir la infección pulmonar. Médicos del hospital han confirmado que la radiografía de tórax más reciente muestra una mejoría gradual. No obstante, su pronóstico sigue siendo reservado, y su recuperación avanza con precaución, dado su historial de problemas respiratorios.
A pesar de su estado, Francisco ha seguido gobernando la Iglesia desde su habitación, manteniéndose informado y recibiendo visitas de altos funcionarios del Vaticano. También ha participado en ejercicios espirituales y ha enviado mensajes a la comunidad católica, lo que demuestra su fortaleza y compromiso con su labor pastoral.
El mundo católico sigue pendiente de su evolución, y líderes religiosos han pedido a los fieles que continúen orando por su pronta recuperación. En los próximos días, se espera un nuevo parte médico que detalle los avances en su estado de salud y la posibilidad de que retome algunas actividades públicas.