A partir del 2 de abril, Ferrari aplicará un aumento del 10% en los precios de varios de sus modelos en Estados Unidos. La decisión responde a los recientes aranceles del 25% impuestos por el gobierno a los automóviles fabricados fuera del país.
Entre los modelos más afectados están el Purosangue, 12Cilindri y F80, cuyas etiquetas de precio aumentarán considerablemente. En el caso del SUV Purosangue, cuyo costo base es de 430,000 dólares, la subida será de 43,000 dólares adicionales. Para el F80, con un precio superior a los 3.5 millones de dólares, el ajuste superará los 350,000 dólares.
Ferrari aclaró que los autos importados antes del 2 de abril mantendrán su precio original. Sin embargo, los clientes que aún están en listas de espera –que superan el año para varios modelos– deberán pagar la nueva tarifa.
A pesar del incremento, la compañía mantiene sus objetivos financieros para 2025 y sigue adelante con sus planes de lanzar su primer modelo 100% eléctrico en octubre.
Tras el anuncio, las acciones de Ferrari subieron levemente, mientras que las de los fabricantes de autos estadounidenses registraron caídas.