La Autoridad Metropolitana de Transporte (MTA) de Nueva York ha revelado un nuevo mapa del sistema de metro, marcando la primera actualización significativa en casi medio siglo. Este rediseño busca ofrecer una representación más clara y moderna de las complejas rutas subterráneas de la ciudad.

El mapa actualizado reemplaza el diseño de 1979, conocido por su complejidad y estilo "espagueti". La nueva versión presenta líneas audaces sobre un fondo blanco, con formas estilizadas de los distritos y símbolos que indican estaciones accesibles y puntos de transferencia gratuitos entre líneas.

Aunque la MTA esperaba que el rediseño mejorara la experiencia del usuario, la reacción del público ha sido mayoritariamente negativa. Muchos usuarios han calificado el nuevo mapa como innecesariamente complejo y confuso, sugiriendo que es más adecuado para turistas que para los habituales viajeros del metro.

A pesar de las críticas, la MTA ha comenzado a instalar los nuevos mapas en las estaciones y trenes, con planes de completar la transición en las próximas semanas. Además, se actualizarán las pantallas digitales en las estaciones para reflejar cambios en el servicio en tiempo real, mejorando la información disponible para los pasajeros.