En una edición especial de la tradicional conferencia matutina, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, celebró este 30 de abril el Día de la Niña y el Niño con una dinámica inédita en Palacio Nacional: ceder el micrófono a las infancias para que expresaran sus dudas e inquietudes directamente a la mandataria.
El evento, titulado coloquialmente como la “mañanera del pueblo”, estuvo dirigido por menores, hijos de periodistas acreditados, quienes participaron activamente desde el podio presidencial. En un ambiente distendido y festivo, Sheinbaum felicitó a las y los asistentes desde el inicio, destacando la relevancia de abrir espacios para que las nuevas generaciones conozcan y se acerquen a la vida pública del país.
A diferencia de las conferencias habituales, no hubo participación de medios de comunicación ni influencers, ya que el enfoque de la jornada fue completamente infantil. La presidenta explicó que este ejercicio busca fomentar una relación cercana entre el gobierno y la niñez, utilizando herramientas lúdicas que también permiten conocer sus preocupaciones sobre el país en que viven.
“La voz de las niñas y los niños también cuenta”, afirmó Sheinbaum, quien reiteró la importancia de construir políticas públicas que tomen en cuenta a los sectores más jóvenes. Al cierre de la sesión, las y los pequeños disfrutaron de una presentación musical especialmente preparada para la ocasión.
Con esta iniciativa, la presidenta marcó un precedente en la forma en que el Ejecutivo Federal se vincula con la infancia, apostando por una gobernanza más empática, accesible y sensible a las voces del futuro.