Una poderosa tormenta azotó el miércoles a Pensilvania, Ohio y otros estados vecinos, derribando árboles y cables eléctricos y dejando a más de medio millón de personas sin electricidad. Al menos tres muertes han sido reportadas, y las autoridades advierten sobre más tormentas en los próximos días.

Más de 425,000 personas quedaron a oscuras en Pensilvania y 40,000 en Ohio, mientras que otros estados como Michigan, Nueva York y Virginia Occidental también experimentaron cortes de energía. Según Matthew Brown, jefe de servicios de emergencia del condado Allegheny, los daños han sido de una magnitud "sin precedentes". Duquesne Light, la compañía de electricidad en Pensilvania, informó que los cortes de energía podrían durar hasta una semana.

Las víctimas fatales incluyen a un hombre electrocutado mientras intentaba apagar un incendio en State College y a una persona más en Pittsburgh. Además, un hombre de 67 años murió cuando un árbol cayó sobre su casa en Ross Township.

Los vientos de hasta 145 km/h causaron daños significativos en la región, y el Aeropuerto Internacional de Pittsburgh registró su tercera ráfaga más fuerte de la historia con 114 km/h. Las autoridades del Servicio Meteorológico Nacional advierten sobre más lluvias intensas y el riesgo de inundaciones en varias áreas.