Ucrania lanzó un ataque con 105 drones que obligó a Rusia a cerrar temporalmente una decena de aeropuertos, incluyendo cuatro en Moscú, días antes del desfile militar del 9 de mayo para conmemorar la victoria sobre la Alemania nazi. Pese a las tensiones, el Kremlin confirmó la asistencia de 29 mandatarios, entre ellos Luiz Inácio Lula da Silva, de Brasil, y Xi Jinping, de China, quienes acompañarán al presidente Vladimir Putin en la Plaza Roja.
La ceremonia de este año genera expectativa, ya que se prevé que Putin utilice su discurso para justificar la ofensiva militar en Ucrania iniciada en febrero de 2022, que ha dejado decenas de miles de muertos y mantiene a las tropas rusas en control de cerca del 20% del territorio ucraniano. Como parte de las conmemoraciones, Rusia decretó un alto el fuego unilateral del 8 al 10 de mayo, medida que Kiev calificó como un intento de garantizar la seguridad del evento.
Además de los líderes de Brasil y China, el Kremlin anunció la presencia de mandatarios de Indonesia, Egipto, Vietnam, Serbia, Cuba y varias exrepúblicas soviéticas, entre otros. Kiev advirtió a los países invitados que marchar junto a las tropas rusas equivaldría a “compartir la responsabilidad” de las acciones militares en Ucrania. Este año participarán formaciones militares de 13 naciones, incluidas China, Birmania y Egipto.
En Moscú se ha reforzado la seguridad, prohibiendo el ingreso de cigarrillos electrónicos, monopatines y mascotas al desfile. Mientras las calles se llenan de símbolos patrióticos, Ucrania criticó las celebraciones, asegurando que “no tienen relación con la victoria sobre el nazismo”. Pese al clima de tensión, Rusia anunció el canje de 205 prisioneros de guerra ucranianos por otros tantos rusos, como gesto previo al acto conmemorativo.