En el municipio de Morelia, Michoacán, un hombre identificado como Álvaro “N” fue vinculado a proceso por su presunta responsabilidad en un caso de maltrato animal, luego de someter durante un año a un jumento a condiciones de trabajo que pusieron en riesgo su salud y bienestar. La Fiscalía General del Estado logró sustentar ante un Juez de Control que el animal fue utilizado de forma excesiva para transportar costales de tierra y como medio de transporte personal, lo cual le provocó una columna arqueada y cicatrices visibles en sus extremidades.

De acuerdo con las investigaciones, el maltrato se prolongó entre febrero de 2024 y febrero de 2025. Durante este tiempo, el acusado tampoco proporcionó al animal acceso adecuado a agua ni atención médico-veterinaria, lo que agravó las condiciones de maltrato. La denuncia fue presentada ante la Unidad de Investigación y Persecución del Delito de Maltrato Animal, perteneciente a la Fiscalía Especializada en Delitos Contra el Ambiente y la Fauna.

Durante la audiencia, celebrada por citación, se presentaron pruebas suficientes que permitieron al juez vincular a Álvaro “N” a proceso e imponerle medidas cautelares, además de establecer un plazo de dos meses para el cierre de la investigación complementaria. Este periodo permitirá fortalecer el caso con más elementos probatorios.

El caso ha reavivado la conversación pública sobre el maltrato animal y la necesidad de aplicar la ley con firmeza. Las autoridades recordaron que existen diversas instituciones y canales para denunciar estos delitos, como la Brigada de Vigilancia Animal, la Procuraduría Ambiental y del Ordenamiento Territorial (PAOT), el Consejo Ciudadano de la CDMX y la Fiscalía de Investigación en Delitos Ambientales, disponibles para atender reportes de manera confidencial y efectiva.