El estreno del esperado live action de Lilo & Stitch no solo trajo de vuelta la entrañable historia de la niña hawaiana y su amigo alienígena, sino también una colección especial de productos que buscaban emocionar a los fans. Entre ellos, una palomera con peluche de edición limitada que causó gran revuelo. Sin embargo, en varios cines, la emoción inicial se tornó en frustración, ya que los coleccionables se agotaron desde temprano.
Desde la mañana, cientos de seguidores hicieron largas filas en el Cinépolis de Plaza Jardín con la ilusión de llevarse la codiciada palomera a casa. Al llegar, muchos se encontraron con un aviso que indicaba que el inventario se había terminado, y aunque el personal agradeció la paciencia, la decepción fue palpable entre quienes no lograron adquirir el producto.
El atractivo de la palomera, que tenía un precio de 525 pesos —más accesible que otros coleccionables similares de la cadena— y que incluía un peluche especial, evidenció el fuerte apego emocional que la historia de Lilo y Stitch sigue generando tras más de dos décadas desde su estreno original. Esta alta demanda reveló también la necesidad de una mejor planeación para futuras promociones y evitar que los fans se queden con las manos vacías.
El filme revive la mágica narrativa que habla sobre el amor, la familia y la palabra “Ohana”, valores que mantienen viva la conexión del público con la saga. A pesar de los contratiempos, la producción promete mantener el legado de esta historia en la pantalla grande y en la memoria de sus seguidores.