En medio del paro nacional encabezado por la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), el gobierno federal informó que tres estados concentran la mayor cantidad de escuelas sin clases: Oaxaca, Zacatecas y Chiapas.
Durante la conferencia matutina de este lunes, el titular de la Secretaría de Educación Pública (SEP), Mario Delgado, detalló que el 9.88 por ciento del total de planteles públicos en el país se encuentra actualmente en paro, afectando a una parte del alumnado, pero sin detener en su totalidad las actividades del sistema educativo nacional.
“Más de 19 millones de niñas, niños y jóvenes, es decir, el 92.1 por ciento de los alumnos de educación básica, asistieron a clases la semana pasada en 182 mil escuelas públicas del país”, aseguró Delgado frente a la presidenta Claudia Sheinbaum.
El funcionario explicó que Oaxaca encabeza la lista con 12 mil 484 escuelas en paro, lo que representa un 95 por ciento del total en ese estado. Le sigue Zacatecas con 2 mil 195 escuelas cerradas (49.59 por ciento), y Chiapas con 3 mil 388 planteles sin clases, equivalentes al 18.24 por ciento. También se han registrado cierres en Baja California Sur, Chihuahua y Ciudad de México, aunque en menor medida.
En cuanto al tema salarial, Delgado recordó que el actual gobierno ha impulsado aumentos históricos en los ingresos de los maestros. Comparó que en el sexenio de Vicente Fox el salario promedio era de 4 mil 582 pesos; con Felipe Calderón subió a 6 mil 709; durante el gobierno de Enrique Peña Nieto fue de 9 mil 580; y con Andrés Manuel López Obrador se elevó a 17 mil 635 pesos.
Gracias al reciente incremento decretado por la presidenta Sheinbaum, el salario promedio de los docentes alcanzó los 18 mil 965 pesos. “Este aumento es el segundo más importante en al menos los últimos 40 años. Es un reconocimiento de la presidenta al magisterio nacional”, subrayó el titular de la SEP.
Además, destacó que con el Fondo de Pensiones para el Bienestar se garantiza que los docentes que ganan 16 mil pesos mensuales o menos puedan jubilarse con el equivalente a su último salario base de cotización, superando ampliamente las pensiones que se otorgaban tras la reforma al ISSSTE de 2007, que promovió el esquema de cuentas individuales en las Afores.