Un sismo de 6.3 grados con epicentro cercano a Paratebueno estremeció el departamento de Cundinamarca la mañana del domingo 8 de junio. La cercanía y poca profundidad del movimiento aumentaron la intensidad de las vibraciones, que se sintieron también en ciudades como Bogotá y Villavicencio, generando alarma entre la población.
Las autoridades reportaron daños en viviendas, derrumbes parciales y cortes en los servicios de energía y telecomunicaciones en varias zonas rurales. En Paratebueno, el temblor provocó deslizamientos que afectaron las vías entre Villavicencio y Yopal, además de la caída de muros y techos en comunidades cercanas.
En la capital colombiana, los temblores ocasionaron fallas en ascensores, crisis de ansiedad en algunos ciudadanos y grietas en más de 170 edificios de menor altura. La Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo movilizó equipos para evaluar daños y asegurar que no haya personas atrapadas tras el movimiento telúrico.
El Servicio Geológico advirtió que podrían registrarse réplicas durante las próximas 48 horas, por lo que hizo un llamado a mantener la precaución en viviendas vulnerables y seguir las recomendaciones oficiales para minimizar riesgos durante este periodo.