Marcelo Ebrard, titular de la Secretaría de Economía, descartó cualquier intención por parte de General Motors de abandonar el territorio mexicano. Durante su intervención en la Asamblea Anual de la American Society of Mexico, el funcionario subrayó que la empresa continuará con sus operaciones habituales y que no hay planes de despidos ni clausura de instalaciones.

Ebrard resaltó que las plantas de la compañía en México figuran entre las más eficientes a nivel global, por lo que un traslado completo hacia Estados Unidos no resultaría viable financieramente. Aunque reconoció que podrían llevarse a cabo ajustes menores en la capacidad operativa, aseguró que no se trata de una desinversión ni mucho menos de una retirada.

El funcionario también destacó la labor de la Secretaría para mantener comunicación permanente con las empresas del sector automotriz, con el fin de garantizar un entorno competitivo y favorable para la inversión. Según explicó, México sigue siendo un punto estratégico para la fabricación, sobre todo en el ámbito de los vehículos eléctricos.

Por su parte, Larry Rubin, presidente de la American Society of Mexico, coincidió en que General Motors mantiene su compromiso con el país. Añadió que la industria manufacturera mexicana sigue siendo atractiva gracias a su mano de obra calificada y a su cercanía con el mercado estadounidense.