El presidente de Irán, Masud Pezeshkian, anunció oficialmente el término de la ofensiva militar que durante doce días mantuvo en tensión al país, luego de que entrara en vigor el alto al fuego impulsado por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump. El anuncio fue emitido mediante un mensaje público en el que el mandatario subrayó el sufrimiento vivido por la población durante el conflicto.
Pezeshkian calificó las acciones armadas como una agresión “imprudente” por parte del gobierno israelí, al tiempo que reconoció la necesidad urgente de enfocar los esfuerzos del país en la recuperación de las zonas afectadas. Según el presidente, este cese marca una oportunidad para restablecer la estabilidad y evitar una escalada mayor que podría haber tenido consecuencias irreversibles.
La declaración del alto al fuego fue recibida con alivio en distintos sectores de la sociedad iraní, donde se vivieron días de incertidumbre, evacuaciones forzadas y daños a la infraestructura básica. Autoridades locales han comenzado con los primeros balances sobre los estragos ocasionados en regiones estratégicas, especialmente en el norte del país, donde se reportaron ataques directos.
El gobierno iraní reiteró que permanecerá en alerta ante cualquier posible violación del acuerdo y solicitó a la comunidad internacional mantener una vigilancia activa. Al concluir su mensaje, Pezeshkian enfatizó que Irán buscará retomar canales diplomáticos y promover la paz como eje central de su política exterior tras el episodio bélico.